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sábado, 15 de noviembre de 2014

¡Cuidado con la apostasía!

Y debes saber esto: que en los días venideros vendrán tiempos difíciles; porque los hombres serán egoístas, amigos del dinero, arrogantes, soberbios, difamadores, desobedientes a sus padres, ingratos, irreverentes, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, enemigos de lo bueno, traidores, impetuosos, envanecidos, y amigos de los placeres más que de Elojím, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán su eficacia. Apártate de ellos. (2 Timoteo 3:1-5)
Ésta es una advertencia  para estos días de gran deserción de la fidelidad entregada a nosotros. Hoy día a lo bueno le llaman malo y lo malo le llaman bueno, el mundo está completamente al revés. La mentira reina sobre la verdad y los engañadores siguen engañando. Los que exponen la mentira y  enseñan la verdad son perseguidos mientras los malvados se salen con la suya. 


Pero tú has seguido de cerca mi enseñanza, mi manera de vivir, mi propósito, mi fidelidad, mi paciencia, mi amor, mi constancia, mis persecuciones, mis sufrimientos, como los que me sucedieron en Antioquía, en Iconio, en Listra, como los padecimientos que sufrí, y de todos me libró el Adón. Sí, todos los que quieran vivir piadosamente en Ieshúa el Mashíaj, padecerán persecución. Por su parte, los hombres malos y engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados. Pero tú persiste en lo que aprendiste y fuiste persuadido, sabiendo de quiénes aprendiste, ya que desde niño conoces las Sagradas Escrituras, las cuales pueden hacerte sabio en la salvación que por la lealtad hay en Ieshúa el Mashíaj. Toda la Escritura es inspirada por Elojím, y es útil para la enseñanza, para la refutación del error, para la corrección, para la instrucción en la justicia, a fin de que el hombre de Elojím esté completamente calificado, equipado para toda buena obra. (2 Timoteo 3:10-17)
Somos exhortados a conocer las Sagradas Escrituras, el TaNaK, ya que cuando la carta a Timoteo fue escrita no existía lo que se conoce como "Nuevo Testamento".



Ciertamente el Todopoderoso es Di-os sobre todo el mundo pero el dios de los Musulmanes NO es el Todopoderoso. La apostasía de nuestros días es alarmante, un indicio de que estamos en los tiempos del fin de la era presente y de la llegada de nuestro Rey Ieshúa Ben David, el Mashíaj.

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