Las Escrituras muestran claramente que el que reinará a Israel para siempre es un descendiente del Rey David y nunca hablan de que el Creador se encarnaria en un hombre o de que el Rey de Israel sería un ser celestial que se encarnaría. De serlo así entonces las Escrituras se contradirían y entonces habría que inventar una explicación como la de un "misterio" que no podemos comprender. Pero bendito sea el Todopoderoso que nos da su mensaje claro cuando nos quitamos los lentes que nos han sido impuestos por la religión. Las Escrituras no se contradicen, el Rey de Israel es un hombre descendiente de la familia real del Rey David.
2 Juan 1:7 ECR
(7) Porque muchos engañadores ya han salido por el mundo, los cuales no confiesan que Yeshua HaMashiaj ha venido como hombre. Este es el engañador y el anti Mashiaj.
2 Juan 1:7 DHH
(7) Pues andan por el mundo muchos engañadores que no reconocen que Jesucristo vino como hombre verdadero. El que es así, es el engañador y el Anticristo.
En otras palabras, esto quiere decir que todo aquel que dice que Jesús es Dios es engañador y contrario a las enseñanzas del Mesías.
Marcos 12:29 ECR
(29) Respondió Yeshua: El primero es: "Shemah Israel, HaShem nuestro Elohim, HaShem uno es"
Juan 20:17 ECR
(17) Yeshua le dijo: "No me toques, porque aun no he subido al Padre; pero ve por ti misma a mis hermanos, y diles: "Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Di-os y a vuestro Di-os".
Las Escrituras no dicen que Jesús es completamente hombre y completamente divino como enseña el Cristianismo (impuesto como dogma de fe en el concilio de Calcedonia, 451 EC). Esta es una doctrina de los hombres y no del Eterno producto de la filosofia greco-romana y no del pensamiento netamente hebreo de quienes son estas Escrituras.
Tampoco habla de preexistencia pues los seres humanos no podemos preexistir. Esto es una variación de la doctrina de la deidad del Mesías que es a su vez parte de la doctrina de la Trinidad.
1 Pedro 1:20 BL95
(20) Dios pensaba en él desde antes de la creación del mundo, pero no fue revelado sino a ustedes al final de los tiempos.
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